Fusilaron a una manicura venezolana en Morón: creen que fue una venganza narco contra su marido

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La pareja estaba en el país desde hacía tres meses. El domingo, la joven había sido baleada en la cabeza por sicarios en su casa y murió después de tres días de agonía.

La víctima murió anoche en el Hospital Güemes de Haedo.

Aylin Carolina Reyes García, una manicura de nacionalidad venezolana que había sido baleada en la cabeza el domingo pasado en su negocio de la localidad bonaerense de Morón, murió anoche después de permanecer internada con muerte cerebral.

La víctima, de 33 años, tenía tres hijos y estaba casada con Luis Ernesto Campis Bermúdez, también venezolano y un año menor que ella. Para los investigadores, él era el destinatario original del ataque en el que murió su esposa. La sospecha surgió después de que él mismo le dijera a la Policía que la familia había viajado desde Venezuela tres meses atrás a causa de una deuda de 4.000 dólares que tenía con un capo del narcotráfico al que llamó “Joel”.

Según indicó Télam, Reyes García murió anoche como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio en el hospital de Haedo, donde se encontraba internada desde el día del hecho y este miércoles había sido diagnosticada con muerte cerebral.

El testimonio de una prima de Reyes García que estaba con ella al momento del hecho fue clave para reconstruir los momentos previos al crimen. De acuerdo a su relato, los sicarios se habían hecho pasar por acompañantes de una mujer que sacó turno para atenderse con la víctima y de un momento al otro desenfundaron sus armas y dijeron que era un asalto.

A la manicura, la llevaron por la fuerza a una habitación y le dispararon un tiro en la cabeza. Después, fueron directamente a atacar a la pareja de la mujer y también tiraron a matar, pero esta vez la bala solo rozó a Campis Bermúdez, que cayó herido delante de sus tres hijos menores de edad.

El hombre baleado fue sometido a una intervención quirúrgica en la que le extrayeron una bala que le quedó alojada entre el cuero cabelludo y el cráneo; y se encuentra fuera de peligro y recuperándose.

Los menores fueron asistidos en el lugar y quedaron en principio bajo el cuidado de la prima de la mujer asesinada. En tanto, el fiscal Nicolás Filippini, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Morón, modificó la calificación legal de la causa a “homicidio agravado por el uso de arma de fuego” tras la muerte de Reyes García.

La hipótesis más fuerte apunta a un ajuste de cuentas, aunque no descartan otras líneas de investigación todavía. El hecho ocurrió el domingo en una vivienda ubicada en la calle Larrea al 900, donde la mujer vivía y tenía el local en el que trabajaba, y buscan en los videos de las cámaras de seguridad de la zona pistas para identificar a los agresores.

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